Back to top

Nota de aplicación

Se refiere al arte y cultura asociados a la dinastía beréber islámica de mismo nombre que gobernó Ifriqiya (Túnez moderno) desde el año 909 al 972 y en Egipto del 969 al 1171. Los ancestros de los Fatimida, de la secta Shi'a, puede ser rastreados hasta Fatima, la hija de Muhammad. Los Fatimida debieron contener a muchos rivales, así como también a los cruzados. El arte Fatimida es valioso por su internalización: conectan el mundo islámico del este y oeste y se mantuvo abierto a herencias helénicas del Mediterráneo y a algunas ideas del poder cristiano del norte. A pesar que los artistas Fatimida continuaron empleando materiales y técnicas desarrolladas por los Tulunida, la abstracción usada por los Tulunida fue reemplazada por un interés en explorar la tradición de representación figurativa heredada de Iraq. La pintura, ilustración de libros, tallado de madera, marfil y vidrio, el diseño cerámico y textil consiguieron una decoración figurativa sin paralelo al arte islámico contemporáneo. También es evidente un interés por el naturalismo. La iconografía del arte Fatimida muchas veces se asemeja al arte Abasida cortesano. A medida que la tradición figurativa se fue desarrollando, así también sucedió con los diseños basados en un diseño de infinito sistema lineal, formando una ornamentación que se transformó en una de las formas más exitosas del arte islámico abstracto. El arte figurativo resultó inapropiado para los edificios religiosos y en su reemplazo fueron decorados con un vigoroso nuevo estilo de talla en piedra que típicamente presenta elegantes inscripciones en distintiva escritura kufic, elaborada con elementos foliares y floras. El motivo de concha era muy común para los Fatimida desde muy antiguo, como es posible observar en la fachada de la mezquit de al-Akmar. No permanecen restos de los dos palacios Fatimida que se erigieron en el centro de El Cario, sin embargo informes sobre ellos dan cuenta de su magnificencia.
Tipo de término